Hola a todos,
Ante todo, me presento: mi nombre es Pablo y es la primera vez, en más de 20 años, que escribo en un foro de MTB… lo que quiere decir que voy cumpliendo años 😃y que van quedando lejos las veces, que allá por el 2003, pedía consejo sobre qué bici elegir (finalmente fue una Conor WRC1, de horquilla simple delantera). El caso es que disfruté mucho esa bici durante unos 5 años, siguiendo lo que, desde que era un enano, fue durante los 20 años previos mi deporte favorito y con el que recorrí parte de la geografía nacional… si bien, por razones de distinta índole, en los 15 siguientes apenas he vuelto a montar.
Así que, animado por la compra de una casa en el noroeste madrileño y por consejos de amigos que siguen montando, estoy pensando en retomar este deporte, y lo cierto es que, con 44 palos, 10 kg más que cuando me conecté a un foro por última vez y alguna lesión entre medias (nada serio, pero los 44 no son lo mismo que los 20…) me planteo la mejor manera de retomarlo. Mis amigos insisten en que me compre bici nueva por lo mucho que han avanzado, y ahí empiezan mis dudas.
La primera es, ¿realmente ha avanzado todo tanto como para no mantener mi “casi nueva” WRC1 de hace 20 años? La segunda es que, quizás contestando a la primera, cuando compré mis dos bicis anteriores, comprabas una bici de montaña “y ya está”. Ahora hay eléctricas, convencionales, de gravel, de enduro, de trail, de cross-country… ¡¡menudo lío!! ¿A qué tipo se parecería más mi antigua WRC1? Así que os comparto el uso que daré a mi bici para pediros consejo sobre cuál consideráis se adaptará mejor a mis necesidades:
En general, y abriendo juego entre las dos opciones más opuestas (gravel y e-MTB) creo que, desde enfoques bastante diferentes, ambas pueden ser bastante complementarias a mi WRC1 y son, de hecho, las bicis que más me recomiendan los dos amigos que tengo en el “oficio”: uno me dice que mi tipo de uso es calcado al perfil gravels; el otro argumenta que con la eléctrica voy a ampliar mucho mi radio de acción (en mi contexto de alguna lesión / forma física muy distinta a la de hace 20 años), tanto por kilómetros como por por tipo de uso (ej, subir por senderos donde hasta ahora no entraba). También me planteo, en el caso de que escoja una eléctrica, qué tipo me convendría más, donde me inclinaba por algo más tipo XC que gravel: prejuzgo que el menor peso & rozamiento de una gravel eléctrica no resultan una ventaja tan evidente frente a otras eMTB como en una bici “muscular” y que equipamientos tipo doble suspensión probablemente “mariden” bien con una bici cuyo tipo de uso me permitirá ampliar el que le daba hasta ahora, siempre considerando que parte importante de mis salidas serán por pistas forestales y senderos sin gran complicación (aunque he oído que con una eléctrica pronto “pica el gusanillo” de probar algo a más...)
Así que me gustaría abrir el debate ¿cuál os parece que, en mi caso, puede ser una decisión acertada? Y otra pregunta, de "cultura general": una cross-country, ¿está más cerca de una gravel o de una MTB de toda la vida como mi Conor (que imagino equivale a lo que ahora sería una trail)?
Saludos,
Cruce
Ante todo, me presento: mi nombre es Pablo y es la primera vez, en más de 20 años, que escribo en un foro de MTB… lo que quiere decir que voy cumpliendo años 😃y que van quedando lejos las veces, que allá por el 2003, pedía consejo sobre qué bici elegir (finalmente fue una Conor WRC1, de horquilla simple delantera). El caso es que disfruté mucho esa bici durante unos 5 años, siguiendo lo que, desde que era un enano, fue durante los 20 años previos mi deporte favorito y con el que recorrí parte de la geografía nacional… si bien, por razones de distinta índole, en los 15 siguientes apenas he vuelto a montar.
Así que, animado por la compra de una casa en el noroeste madrileño y por consejos de amigos que siguen montando, estoy pensando en retomar este deporte, y lo cierto es que, con 44 palos, 10 kg más que cuando me conecté a un foro por última vez y alguna lesión entre medias (nada serio, pero los 44 no son lo mismo que los 20…) me planteo la mejor manera de retomarlo. Mis amigos insisten en que me compre bici nueva por lo mucho que han avanzado, y ahí empiezan mis dudas.
La primera es, ¿realmente ha avanzado todo tanto como para no mantener mi “casi nueva” WRC1 de hace 20 años? La segunda es que, quizás contestando a la primera, cuando compré mis dos bicis anteriores, comprabas una bici de montaña “y ya está”. Ahora hay eléctricas, convencionales, de gravel, de enduro, de trail, de cross-country… ¡¡menudo lío!! ¿A qué tipo se parecería más mi antigua WRC1? Así que os comparto el uso que daré a mi bici para pediros consejo sobre cuál consideráis se adaptará mejor a mis necesidades:
- Uso más habitual por pistas forestales, generalmente de tierra (ej, puerto Fuenfría) y, con menos frecuencia pero más de la que me gustaría, por asfalto (para llegar hasta las zonas anteriores)
- Uso puntual por zonas algo más técnicas, sin tampoco una gran exigencia (los años…); aunque disfruto entrando de vez en cuando en este tipo de zonas, en la práctica no paso por ellas más de un ¿5%? del tiempo.
- No hago descenso como tal. Subo y luego bajo por donde he subido (espero explicarme :).
- Presupuesto, en principio abierto. No busco lujos, aunque tampoco tengo problema en pagar algo más (3-4K? €) si a cambio el retorno es evidente.
- Mi forma física roza por los pelos lo decente, y es bastante diferente a la que tenía hace 20 años. De vez en cuando alguna lumbalgia, alguna otra lesión de tendones… Por hacer el cafre intentando pasar demasiado rápido de medias maratones -que he corrido bastantes- a maratones, he tenido que dejar de correr… y no quiero que me pase lo mismo con la bici.
- Por último, parte de las zonas que me rodean son algo exigentes en relación a mi estado de forma, por distancia o por desnivel.
En general, y abriendo juego entre las dos opciones más opuestas (gravel y e-MTB) creo que, desde enfoques bastante diferentes, ambas pueden ser bastante complementarias a mi WRC1 y son, de hecho, las bicis que más me recomiendan los dos amigos que tengo en el “oficio”: uno me dice que mi tipo de uso es calcado al perfil gravels; el otro argumenta que con la eléctrica voy a ampliar mucho mi radio de acción (en mi contexto de alguna lesión / forma física muy distinta a la de hace 20 años), tanto por kilómetros como por por tipo de uso (ej, subir por senderos donde hasta ahora no entraba). También me planteo, en el caso de que escoja una eléctrica, qué tipo me convendría más, donde me inclinaba por algo más tipo XC que gravel: prejuzgo que el menor peso & rozamiento de una gravel eléctrica no resultan una ventaja tan evidente frente a otras eMTB como en una bici “muscular” y que equipamientos tipo doble suspensión probablemente “mariden” bien con una bici cuyo tipo de uso me permitirá ampliar el que le daba hasta ahora, siempre considerando que parte importante de mis salidas serán por pistas forestales y senderos sin gran complicación (aunque he oído que con una eléctrica pronto “pica el gusanillo” de probar algo a más...)
Así que me gustaría abrir el debate ¿cuál os parece que, en mi caso, puede ser una decisión acertada? Y otra pregunta, de "cultura general": una cross-country, ¿está más cerca de una gravel o de una MTB de toda la vida como mi Conor (que imagino equivale a lo que ahora sería una trail)?
Saludos,
Cruce